¿Qué es una Passive House o Casa Pasiva?
Los edificios o casas pasivas se caracterizan por un excelente aislamiento térmico, ventanas de altas prestaciones termo acústicas con hasta triple acristalamiento y un sistema de ventilación con recuperación de calor, entre otras cosas. Gracias al sistema de ventilación, la calidad del aire es notablemente mejor que en los edificios convencionales: baja concentración de C02, aire filtrado de partículas y alérgenos que influye en el descanso y en la salud de las personas. Otros criterios para el estándar de la casa pasiva incluyen un alto nivel hermético al aire y la supresión de puentes térmicos.
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Técnicamente se trata de un edificio en el cual el confort térmico (según la ISO 7730) se consigue mediante el calentamiento o enfriamiento del flujo de aire necesario para alcanzar la ventilación óptima del espacio interior. Las características principales de estos edificios son:
• Alto grado de confort térmico interior, tanto en la estación fría como en la cálida. Rango de confort permitido entre 20-25˚C.
• Aire de calidad excepcional garantizada durante 24 horas al día.
• Calidad en la construcción para evitar puentes térmicos, infiltraciones no deseadas, condensaciones superficiales o intersticiales etc. Se reduce el riesgo de patologías derivadas de la física de la construcción.
• Precios asequibles de construcción.
• Reducción de las facturas de consumo energético.
• Versatilidad, puede utilizarse para cualquier tipología, clima y sistema constructivo. Sencillez en su implantación
• Durabilidad en el tiempo de las soluciones. Garantía de un buen funcionamiento durante muchos años con medidas mínimas de mantenimiento.
• No requiere comportamientos específicos del usuario para lograr un correcto funcionamiento.
• Niveles elevados de satisfacción por parte del usuario/propietario
¿Cómo funciona?
No se establece un método o un sistema constructivo, dejando esta elección al proyectista. Esta característica hace que sea un estándar global, con infinitas aplicaciones locales. Únicamente establece una serie de exigencias o limitaciones que hay que cumplir, sea cual sea el sistema constructivo empleado. Exigencias del estándar Casa Pasiva o Passivhaus:
- Demanda de calefacción < 15kWh/m2 año o 10W/m2
- Demanda de refrigeración < 15kWh/m2 año + humedad según clima
- Demanda energía primaria renovable (PER)
- < 60 kWh/m2 año PH CLASSIC
- < 45 kWh/m2 año PH PLUS
- < 30 kWh/m2 año PH PREMIUM
- Hermeticidad de la envolvente < 0,6h-1 50Pa
- Sobrecalentamiento ≤ 10% (máximo de 10% de las horas del año a una temperatura superior a 25˚C)
Pruebas de Hermeticidad
Existen cada vez más argumentos a favor de trabajar la hermeticidad de la envolvente de los edificios, a pesar de que el Código técnico de la edificación no lo contempla: reducir riesgo de condensaciones intersticiales, reducir pérdidas energéticas, evitar entrada de agentes agresivos exteriores o contaminación etc. La hermeticidad de un edificio se mide mediante el test de Blower Door. Esta prueba nos permite conocer el valor n50 que define la hermeticidad al aire según la UNE EN 13829:2003 Para alcanzar el certificado Passivhaus es obligatorio realizar un test de Blower Door aunque se recomienda realizar otro de trabajo una vez terminada de ejecutar la capa hermética. Edificios grandes o complejos pueden requerir de más pruebas durante la fase de ejecución.
Económicamente accesibles y extremadamente confortables
Los propietarios de Casas Pasivas contribuyen a su vez a la necesaria transición energética, implementando ésta entre sus cuatro paredes y disminuyendo el impacto ambiental de su vivienda debido a la disminución de emisiones de C02 asociadas a una menor demanda de energía. El coste de inversión requerido para la construcción de una Casa Pasiva es mínimamente superior al de una construcción actual, con sobrecostes estimados de un 5% (en ocasiones el sobrecoste de una construcción está motivado por su singularidad arquitectónica o sus acabados y no por la implementación de las necesarias medidas de eficiencia energética para alcanzar los criterios de este estándar de construcción. Es viable, no obstante implementar este concepto de construcción sin sobrecostes cuando se realiza un enfoque integral para el desarrollo de proyecto y construcción y se cuenta con los profesionales adecuados. Todo dependerá de la formación, el recorrido y la experiencia de estos profesionales en este interesante estándar de construcción.
Al mismo tiempo, sus propietarios necesitan muy poca energía para calefacción o refrigeración y, por lo tanto, pagan una fracción muy baja de los costos habituales de calefacción o refrigeración de una construcción convencional lo cuál contribuye a que el período de amortización sea realmente corto. Además, una casa pasiva por el hecho de demandar menor energía para climatización acaba resultando más flexible y permite combinar con éxito la generación de energía renovable.
Adelantándose y superando las exigencias de las construcciones del futuro
En la Unión Europea, la versión revisada de la Directiva de eficiencia energética de los edificios (EPBD) estipula que a partir de 2019 todos los edificios públicos, y a partir de 2021, todos los edificios privados deben ser edificios de energía casi nula (NZEB). El estándar Passivhaus que tiene más de 25 años de trayectoria ya cumple los criterios para estos requisitos de baja energía en la actualidad y realizando transposición de esa directiva de obligado cumplimiento al marco normativo español la exigencia de este estándar en disminución de demandas de energía sigue siendo mucho más exigente.
Certificado Passivhaus
La certificación Passivhaus de un edificio no es obligatoria para conseguir las altas prestaciones de estos edificios pero implica un control de calidad realizado por una institución independiente que supone una garantía para el cliente y proporciona un valor añadido al edificio.
El certificador revisa que todos los detalles del proyecto que tengan influencia en el balance energético del edificio están diseñados y construidos correctamente para garantizar el funcionamiento del mismo según los estándares de calidad de Passivhaus. La certificación se obtiene una vez terminada la construcción del edificio y una vez que se han aportado todas las evidencias necesarias para poder llevar a cabo el proceso de revisión.
